No lo es por varias razones: Septiembre me llena de nostalgias; que no obstante me invitan a hablar de este árbol, símbolo floral de un país al que le debemos muchos favores: Argentina.
Me sorprendió en un vivero donde le vi plantado por primera vez, allí tenían un ejemplar centenario, precioso, absolutamente lleno de flores.
Enseguida me interesé por conocer su origen, sus cuidados, sin saber que efectivamente su flor es uno de los distintivos nacionales de Argentina y Uruguay, donde además le conocen por Ceibo, Gallito, Sanaduva, Pico de Gallo...Árbol del Coral...
Es melífero, la abejas acuden a él para llenar el buche del preciado néctar de sus flores.
La Erythrina Crista galli contiene alcaloides con propiedades narcóticas y sedativas, de ello habla la cultura Guaraní extensamente.
El árbol del Coral o Erythrina Crista Galli, crece sin dificultad en un suelo húmedo, no importa si es encharcado, su mejor momento para plantarlo es en primavera cuando ya han pasado lo fríos invernales y no hay riesgo de heladas...
...Porque se hiela con facilidad, por lo que tenemos que procurarle abrigo en los días de invierno con fuertes heladas. Por lo tanto no es aconsejable plantarlo en zonas frías, teniendo en cuenta que su hábitat natural está a orillas del río Paraná.
Otra de sus curiosidades es que el Ceibo es el elegido para hacer con él el bombo leguero(instrumento musical). Dicen los entendidos que con él consiguen el mejor sonido.
Las panículas florales de la Erythrina miden alrededor de 40cm ofreciéndonos toda su belleza dos veces al año: una en primavera, y otra en septiembre.
Un recuerdo a mi amiga Karo, una preciosa argentina a quien nunca olvidaré...