

Es una rosa aterciopelada, roja-carmesí, muy perfumada.
Híbrido de té de unos 35 pétalos, muy popular, aunque no en todas las zonas funciona de la misma manera; en el Mediterráneo se encuentra a sus anchas desplegando floraciones sin parar en toda la temporada.
Con pocos cuidados y un abonado a finales del invierno se sentirá como pez en el agua y resurgirá en todo su esplendor a finales les de Marzo.
Me encanta cortar sus rosas , de tallos largos , erectos y disfrutarla varios días en un jarrón para tenerla a la vista y sentirme embriagada por su perfume intenso.
Jamás me desharía de ella.